Si, hombre, voy a mostrarme tal y como soy para que se me desacredite mi discurso por culpa de mi físico, de la manera en la que ya sucede en la realidad.
Aquí por lo menos existe la duda razonable. Dejémoslo así.
En realidad, soy como Buenafuente, sólo que más joven y más feo...