Hace un tiempo,cuando aún tenía alguna "amiga" y salíamos por ahí y me presentaba a laguien yo pensaba que lo mejor era tener una gran sonrisa para que viesen lo positiva que era aunque estuviese hecha una mierda por dentro.
Y ahora pienso que lo mejor es parecer indiferente y serio al principio para que,poco a poco,nos podamos ir soltando y que la gente vea que no somos tan bordes como parecíamos al principio.
He probado las 2 teorías y creo que me va mejor la 2ª.
Con la de ser simpática acababa pareciendo la
tonta de turno super feliz,que lo tiene todo solucionado,a la que no le preocupa nada,que parece manejable,sin carácter,con la que no se puede hablar,de risa nerviosa e incluso pedante por sonreír demasiado.
Y con la 2ª,pues la verdad,que primero me gusta porque me siento yo más a gusto,sin fingir un estado de ánimo que en ese momento no me corresponde.
Al menos no me siento la típica boba...
¿Cuál creeís que es la mejor forma? ¿La primera,la segunda,ninguna...?
