Una vez, en la parada del colectivo, una chica empezó a darme charla. En menos de cinco minutos narró toda su vida, y yo, apenas había pronunciado nada; solo asistir con la cabeza.
Entre las miles de cosas que me dijo, a mi me quedó solo una; que le gustaba leer sobre filosofía existencial. Me acuerdo que lo primero que pensé fue "esta chica es emo...". Su cabello y sus uñas pintadas de negro me reforzaban aquella idea.
Como me había cansado ya de ser el pasivo en la conversación, interrumpí su apabullante monologo, y con vos grave pregunte;
_¿Vos sos emo?
La chica abrió los ojos e hizo un gesto entre anonadada y enojada. Me digo;
_No, pero respeto a ese movimiento cultural.
Posteriormente hubo un silencio incomodo y yo -sagaz como ningún fóbico - le dije;
_Es que al ver el contorno de tus ojos pintados de negro, creí ver en ello a una miembro de aquella tribu urbana.
Ella me respondió;
_No me he pintado los ojos hoy...
...Por suerte vino el colectivo y me saco de aquella incomoda situación.
Esto fue hace un poco mas de un año. Es la primera vez que lo cuento.