He pasado toda la semana santa encerrado en casa, sin salir a ningún sitio más que al trabajo... No es que haya estado bien, quiero decir, me habria gustado ir de procesiones, salir, entrar, etc. pero como no tengo con quién, pues en casita.
El caso es que el domingo, con toda su buena voluntad, mi jefe se me acerca para decirme que me da vacaciones.
Vacaciones!! ( ...sí, ese período de tiempo que la gente suele esperar "como agua de mayo", pero que para mí supone la mayor de las torturas)
Hice el esfuerzo el lunes de salir a comprar el pan, y cuando el panadero fue a darme el cambio, rozó su mano con la mía, y se dio cuenta de que mis manos estaban chorreando de sudor... Enseguida noté el calorcillo en la cara indicando que me estaba poniendo colorado, así que guardé el cambio y salí corriendo de la panadería... ¡pero sin el pan!
Cuatro días llevo ya encerrado en casa, dandole vueltas al asunto, sin ganas de salir, ni ver a nadie, ni que me hablen...
Hay veces en las que me rio, porque la situación fue muy cómica, pero se que no puedo volver a comprar el pan allí, y me da tanta verguenza encontrarme con alguna vecina de las que estaban en la panadería...
Estamos teniendo unos días muy buenos en Málaga, se que debería salir, dar un paseo, tomar el aire... pero me siento tan falto de ganas...
Me ha salido un cayo en el dedo pulgar de tanto hacer zapping (perdón por la exageración) y tengo los ojos enrojecidos de tanto mirar a la pantalla del ordenador, esperando a que alguien en el messenger me responda (esto no lo exagero)...
Tal es mi estado de desesperación que esta mañana he llamado a un psicólogo y me ha dado una cita para mañana por la mañana.
Horror!!
Después de tres intentos fallidos de llamada para anular la cita, me he metido aquí para ver si me podeis ayudar. Se que si os reís de mi no me va a afectar porque no os conozco, pero mañana tengo que enfrentarme cara a cara con el psicólogo.
En fin, que espero que me disculpeis la palabrería, necesitaba contarle a alguien cómo me siento, ahí va mi pregunta:
¿Qué le cuento al psicólogo? ¿cómo se lo digo para que no se ria de mi ni me tome por un tonto? ¿y si me bloqueo y no digo nada? ¿y si no me puede ayudar...?