Pues yo dentro de tres días, amigos, voy a profesar el voto de castidad en la orden de los capuchinos, así que... ¡busco desesperadamente mi última relación sexual!
Ni tías educadas, ni majas, ni cariñosas ni leches... ¡lo que yo quiero es una tía cachonda, tetona y bien **** a ser posible! (y si es más que una, mejor que mejor)
Un saludo suplicante de vuestro Sigurd, sniff, sniff...
P.D: Como sucedáneo, aceptaría a Alberto o a Vergatos, vestidos con liguero, medias de seda y picardías de color rojo pasión. ¡Pero sólo como último remedio, eh! No os ofrezcáis todavía (por más que os muráis de ganas por dentro, lo sé..)