La semana pasada la psiquiatra me ha quitado ya toda la medicación. No puedo ocultar que tengo un poco de miedo, y más sabiendo que el año pasado por estas fechas se me fundieron los plomos... Por otra parte me siento "libre" y como "entrenado", como si tuviera valor y supiera cómo enfrentarme al toro, toro que veo especialmente cerca y al que en pocos días he dado unos cuantos buenos pases...
Tengo ciertos síntomas del síndrome de abstinencia... si bien mucho más flojos que hace dos años... El típico atontamiento y mareo y "silbido" al mover los ojos a los lados, que espero superar en unos pocos días más...
Con el miedo, he probado la hierba de San Juan, y lo único que ha hecho es atontarme más y causarme mareos y casi náuseas, así que tengo guardadas las cápsulas y no sé si tiraré el frasco...
En fin, por de pronto, estoy sin medicación. Y sí, estoy contento y animado. Y si yo, un patán depresivo ansioso acomplejado estoy venciendo la enfermedad -y esta vez ha sido la embestida más dura de las cuatro que he tenido-, ¿qué no podréis hacer vosotros que sois más fuertes que yo? Así que ánimo.
Dios os ayude. No tengáis miedo.