Hola, buenas noches! Hace bastante que doy vueltas por el foro, pero en calidad de voyeur, hasta ahora no he escrito nada a pesar de sentirme identificada al 100% con muchos de vuestros mensajes, pero creo que ya va siendo hora de dejar esta vagancia y obligarme un poco.
Si me pongo a mirar atrás, veo la fobia social como parte de mi desde que tengo uso de razón, ya en el colegio el hecho de ponerme roja o tener que preguntar/pedir algo me mataba, podía estar comiéndome el coco horas y horas, con 6 años no quería salir a jugar con los niños de mi vecindario porque me caían mal y pensaba que se reían de mi (alucino con la lectura de pensamiento a estas edades…) por suerte en el colegio e instituto siempre tuve buenos amigos y pude pasar una adolescencia bastante sociable, feliz y emprendedora, con mis cosas “raras” pero a gusto con mis circunstancias.
En la Universidad la cosa empezó a joderse, dejé la primera carrera (Veterinaria) por un cruce de cables en el que sí tuvo algo que ver mi FS, y me pasé a enfermería, hecho que califico como el mayor cruce de cables de mi vida, pues yo nunca, nunca, nunca he deseado trabajar con personas, aún no entiendo como me metí ahí; trabé muy pocas amistades y puede comprobar lo divertido que es comerse el bocadillo en el lavabo, o pasar días enteros sin dirigirle la palabra a nadie. Por suerte la carrera acabó y he encontrado un trabajo como hecho a medida, trabajo por la noche completamente sola y en paz y además con conexión a Internet. Ya probé de trabajar en un hospital con un montón de personas pululando alrededor y lo pasé fatal, en cuanto tenía un momento libre iba corriendo a encerrarme en el lavabo para estar sola y lejos de las miradas ajenas, lo cual me hacia sentir completamente ********** e irresponsable.
Ahora estoy muchísimo mejor, alguna que otra recaída, pero al menos he dejado de obcecarme con la idea de encajar en algún grupo humano y ante todo he aprendido a quitarle peso a muchísimos de mis pensamientos o reacciones, a ver el lado cómico y absurdo de muchas cosas y a disfrutar de mi soledad sin esa sensación constante de culpabilidad.
Mi problema hoy día es mi gran desmotivación a la hora de conocer gente, por un lado deseo fervientemente encontrar gente compatible conmigo, y por otro me desanimo al ver que la mayoría de personas que conozco me aburren muchísimo, me parecen repetitivas y sin curiosidad por nada, me hastían y me entran unas ganas de huir irrefrenables.
Bueno, a grandes rasgos esta es mi historia.
Un saludo muy grande para tod@s.