Ayer en el metro, camino del curro, en el atestado vagón en que viajaba, entre las decenas de personas, iba un señor ya entrado en la cuarentena, de pie, aferrado a la barra.
Al cabo de unas cuantas estaciones, el citado señor, dobló las piernas, y sin soltarse de la barra se quedó en cuclillas con la cabeza gacha.
Pensé que sería epilepsia, pero se quedó así unos segundos, sin temblar ni demás síntomas epilépticos...
No, tampoco era el típico borracho, o drogata, ni se tambaleaba, ni apestaba a alcohol, ni nada de eso.
Ante el revuelo causado por su postura, fué ayudado entre varias personas, que le levantaron y le dejaron un asiento libre.
Preguntado si se sentía mal, el hombre no dijo ni una palabra, pero tenía una expresión de temor en el rostro y con su mano se agarraba firmemente al brazo del asiento.
Pensé que se trataba de algún diabético que le dió un bajón, o alguna crisis cardíaca, pero también supuse que podría tratarse de algún ataque de pánico, o algo de ansiedad, o incluso fobia social...
El caso es que sentí algo de tristeza por este señor, y quería compartirlo con el resto del foro.
El resto del viaje se quedó sentado con esa extraña expresión en su cara, y con la frente perlada de sudor...
Espero que no fuera nada.