Llevo haciéndolo durante varios años, me corto, me golpeo, me quemo... La intención es provocarme un dolor físico para olvidar el emocional. Suelo hacerlo para autocastigarme o cuando las cosas salen asquerosamente mal.
Sé que así no soluciono nada y que tengo que estar pendiente de ocultar las marcas, pero me puede ese alivio que siento, por efímero que pueda ser.
¿A alguien más le ocurre lo mismo?