Dada una respuesta en uno de los hilos, me encabroné lo suficiente como para poner este hilo, explicándome un poco meor como persona. Luego de esto es posible que quieran echarme del foro o algo, no me interesa. Como está la gente hoy en día, no me extrañaría, ya que no ha cambiado mucho la sociedad desde la Edad Media hasta hoy, bueno, el agua es más potable, el aire está más sucio, hay más basura en los caminos, que encima están cubiertos de asfalto, concreto y piedra, pero la gente sigue matándose entre sí, sigue habiendo discriminación, el baño sigue igual de apestoso, es igual de difícil ganarse el alimento (aunque el tipo de trabajo sea diferente), siguen habiendo tiranos en el poder, solo que esta vez en lugar de espadas y látigos hay TV y gigantografías, químicos y esas cosas. La gente sigue juzgando a la masa por un solo individuo, cuando estoy completamente seguro de ser completamente diferente a cualquiera, aunque por fuera luzca como cualquier tipo que pasa por la calle, por dentro sé que soy diferente. Sí, todos lo somos, eso, diferentes, pero me atrevería a decir que no hay alguien más "diferente" que yo.
Yo soy de los que prefiere leer libros de historia, o de ciencia ficción, me gusta imaginar cosas (pero aunque de hecho me gustaría tener alucinaciones no las he tenido), me gusta inventar historias, me invento algún confidente imaginario y le cuento mis problemas, y finjo que me da algún consejo o algo (aunque sea inútil ya que este personaje sabe las mismas cosas que yo), aunque claro, sé que no es real. Me gusta el sabor de la sangre desde la primera vez que me hice una herida, fue al tratar de sacarle punta a un lápiz, se me resbaló el cuchillo y me hice un corte algo profundo en un pulgar. Soy alguien con mucho rencor en su interior, odio a mucha gente y aunque he querido convencerme de que perdonar es algo bueno, liberador y todas esas cosas que dicen acerca de perdonar, no puedo evitar pensar que al perdonar a alguien perderé una parte de mí, algo que me hace único.
Me gustan los videojuegos, aunque me aburro con rapidez. Me gusta la piratería, la que sea, me gustan las historias de piratas antiguos como Henry Morgan o Calico Jack, también me gusta la cultura pirata que hay hoy en día en Internet, tal vez sea porque va contra el sistema, o porque pone al alcance de la gente humilde cosas a las que de otro modo solamente tendría acceso la gente más acomodada, o tal vez sea por la emoción de romper una regla, o el riesgo de ser cuestionado por las fuerzas de "la ley y el orden" (pffft...
) ¿, no lo sé, puede que todas, o ninguna, no lo sé. Me gusta pensar, imaginar, creo que en el universo de mi mente es en el único sitio en el que soy yo realmente, sin máscaras, sin temores, sin barreras.
Siento rabia. Odio a la gente que cohíbe la libertad de los demás, odio a todo aquel que se cree con el derecho de decirme cómo, cuándo y dónde hacer algo. Odio las normas, porque he vivido conforme a ellas por años, obediente a cada renglón con sus signos de puntuación, obediente a cada cosa porque creía que así era como sobrevivía la humanidad, creía que todos cumplían las reglas, salvo los delincuentes quienes acababan en la cárcel. Luego de desengañarme de ese infantil pensamiento seguí cumpliendo con las normas, llegando puntual al trabajo, haciendo todo como dictaba el manual, cada detalle lo respetaba, por ejemplo en los años que trabajé de guardia de seguridad, no pasaba en la caseta salvo que tuviera que anotar algo, cuando mis compañeros usaban su turno para dormir o perder el tiempo. Hacía rondas constantemente, observaba cada detalle sin que se me fuera nada. Lo único que obtuve fueron palmaditas en la espalda, que mi jefe me tratara de "perro fiel" de forma burlona y que mis compañeros no me tomaran en serio.
En el colegio era igual, todo lo hacía conforme a las reglas por mucho que me perjudicaaran estas mismas.
Cuando me cansé me dí cuenta de que había estado perdiendo el tiempo, pero incluso hoy tengo una serie de bloqueos mentales que me impiden hacer las cosas con libertad, no soy capaz de romper una norma salvo que me logre justificar a mí mismo para eso, o que romper esa norma no requiera que yo haga nada. En resumen me volví flojo.
Ahora mismo no me siento capaz de acercarme a nadie, odio a toda la gente, y aún no puedo explicarme a mí mismo por qué. Muchas veces pienso en hacerles daño, aunque por fortuna son solo ideas, no hay "impulsos", es como mi deseo de suicidarme, quiero hacerlo pero no me atrevo por varias razones. Aunque no es que no se me ocurran buenas ideas para, por ejemplo, esconder los cadáveres, eliminar pistas, crear coartadas, en fin...
Odio estar vivo, porque ya estoy medio muerto.
Encima es peor ahora, desde hace unos 5 ó 6 años me ha estado dando una sensación extraña que a veces muta en dolor, y en coasiones no siento nada, en mi cabeza. Es en zonas específicas. No he podido hacerme los exámenes porque son carísimos. Tal vez muera en la castidad, sin haber sentido emoción alguna en esta aburrida vida y encima de todo sin matar a ninguno de los seres que tanto aborrezco.
A quienes no les guste cómo soy y quieran pedirme que cambie, bueno, les dejo un regalito:
Y que les quede claro el mensajito.