El 2011 va a ser un año épico. Arrojaré de nuevo el guante que desate el duelo antediluviano: un pájaro apátrida contra el universo, y esta vez me alzaré con la victoria.
Me propongo dejar de perder el tiempo. Aprender a organizarlo y colmar cada segundo de desidia y desconsuelo con porciones de valor (mi idea de valor), como puede ser, en mi caso:
-Moverme, hacer algo de ejercicio, que estoy delgaducho... tal vez ir a la montaña, a patearme las calles, a buscar aventuras...
-Aprender inglés, que estoy pez en el asunto, y el futuro depara su uso.
-Tomarme en serio la carrera... bueno, tomarme en serio algo ya será pedir suficiente.
-Buscar a gente que me pueda ayudar a hacer más llevadero el sendero desolado hasta encontrar un oasis donde descansar.
-Crear algo que considere digno de no tirar a la basura (hablo de material artístico).
-Voy a estudiar por mi cuenta otras materias exentas a las impartidas en mi grado... y voy a leer un montón, y a escribir... y a hacer amigos... (El tiempo, el problema siempre es el maldito tiempo).
Este año va a ser épico.