Yo he empezado a probar el mindfulness. Llevo unas dos semanas, luego aún es pronto, pero la verdad es que lo que he sentido hasta ahora es muy muy positivo.
El mindfulness o atención plena, es en realidad una forma de meditación. Es, de alguna forma, el tratar de aplicar la meditación en cualquier momento del día (excepto cuando dormimos.
El mindfulness realmente consiste en estar atento: estar atento a los estímulos que nos llegan de fuera (vista, oído, tacto...), a las sensaciones (dolor, por ejemplo), e intentar percibirlos como si fuera la primera vez. Es increible como cambia la realidad cuando estamos atentos, cuando nos fijamos en las cosas. También hay que estar atento a lo que pensamos (la mente es la mayor enemiga de un fóbico social, pero podemos manipularla -a la mente, claro- para convertirla en nuestra aliada), y a los efectos de lo que pensamos (emociones y sentimientos). Cuando vemos que un pensamiento nos cruza por la cabeza, lo observamos y, tratando de no juzgarlo (tratando de aceptarlo y comprenderlo), lo dejamos pasar, como si de una nube se tratase, y nos volvemos a centrar en la observación atenta de la realida que nos rodea.
Yo lo suelo pasar bastante mal cuando estoy en la calle, delante de gente. Lo que hago ahora es intentar fijarme en la gente, y desearles cosas positivas. Ya que nuestro problema es que nos da miedo la gente (en mi caso sufrí acoso escolar), y que la percibimos como algo hostil, me digo a mí mismo frases del tipo de "os amo", "os deseo lo mejor", "que Dios os bendiga", "que seáis muy felices", etc. El mindfulness, además, está muy ligado a la compasión y al amor: es una práctica que impulsa la aceptación de la realidad. En verdad que lo que he sentido hasta ahora no lo había sentido nunca.
En estas dos semanas a veces he alcanzado tal paz interior, y me he sentido tan feliz, y con tanta armonía, que resulta realmente ilusionante.
|