En algún sentido puede que el toc haya pasado a formar parte de nuestras vidas, ya que es una experiencia muy intensa.
Yo creo que nos acompañará siempre, porque aunque ya no lo suframos nos quedará su recuerdo y el aprendizaje que supone. Puede recordarse como una antigua novia/o con el/la que acabamos mal.
Pero, al menos en mi caso, el toc no ha supuesto aislarme de mi realidad, he podido continuar manteniendo mi trabajo, mi familia, mis amigos. El toc no ha conselguido aislarme, y por eso ahora no tengo sensación de volver a la realidad, nunca salí de ella; aunque el toc ya forma parte de mi realidad.
Un abrazo.
|