Compañero Will-Wonka, despierta!
El problema está en tu coco, no en tus brazos. Graba eso en tu mente.
Dentro de 30 años pensarás: "Quién me diera tener aquellos brazos", "qué estúpido fui amargándome por algo tan nimio, con la cantidad de problemas físicos que tengo ahora y a los cuales les doy menos importancia de la que en su día le di a mi brazos", "qué hermoso era cuando era joven".
Saludos!